En el infierno hay un tablao

Liturgia. La obra es redonda. Desde la pobreza de medios que la Compañía preconiza, se tiende al infinito simbólico (y más allá). El esfuerzo, el cuidado con que está elaborada la pieza, resulta en un trabajo de orfebrería que dejaría atónito a cualquiera que quisiera mirarlo. Quizás el espectador no sepa por qué las cosas suceden como suceden, pero intuye que eso que acontece ante sus ojos es una liturgia. Podría interpretarla en profundidad y comprenderla, en cuyo caso disfrutaría; o bien no entender nada, y aún así disfrutar de ella ?porque es Arte-. También puede no querer entender, no disfrutar de ella y atentar contra el oficiante ?casos hay-, pero nunca podrá desconocer su condición sagrada, ya que el ritual se reconoce a la legua. El todo y las partes.

El técnico de sonido falló en una de las canciones.

Algo diferente. Un texto muy bien interpretado, al principio cuesta introducirte en la obra, pero según se van dando los cambios de vestuario y de personajes, se hace más divertida. y todo mezclado con el baile...algo fuera de lo común que hace de esta obra una alternativa diferente a las típicas obras de teatro o a los miles de monólogos existentes en Madrid. La diverisidad de personajes.

El texto en los primeros 10 minutos.

Un espectáculo cuanto menos curioso. He llevado a mi novio a verlo y era un poco sorpresa para los dos y nos ha encantado! es teatro y flamenco a la vez, y muy divertido!.

Diferente y original. Hola, Fui con mi pareja y aunque eramos poca gente nos lo pasamos bien viendo al curioso Satanás y la excelente bailarina. La originalidad.

Una gran bailarina y bien humor. Me gustó mucho el espectáculo con su mezcla de humor y arte. Recomiendo ir a verlo.

Distinto, original, entretenido, sorprendente y a veces desconcertante. El baile es el hilo de oro. El teatro es el hilo de plata. Entre ambos bordan un interesante brocado, muy original y muy ameno. Con Satanás y sus diablos se ríe uno, muchas veces más por dentro que por fuera.Con la bailarina, en sus distintos bailes y personajes,se recrea uno. (encontré especialmente bella la soleá del principio, así como el zapateado final; a la guajira le imprime una gran sensualidad; el baile griego es muy elegante) Muy cómico el diálogo surrealista entre Salomé y el Bautista. En resumen, algo muy distinto a lo habitual, muy divertido a la vez que profundo. Cabaret o espectáculo de café-concierto de gran calidad. Lo inesperado, lo desconcertante, lo imprevisible del espectáculo.

Imaginación y originalidad. Todo un acierto el planteamiento del espectáculo, en el que se alternan monólogos chispeantes con varios números de baile. Es difícil hacer tantas cosas, tan variadas y con tantos disfraces diferentes en tan poco tiempo (y espacio) como hizo el actor. De igual forma, la bailarina nos deleitó con variados números de danza, desde el flamenco a danza india y danza del vientre, lo que demostró su versatilidad en el escenario.

Diversion desde otro plano. Aqui nos encontramos con una gran obra que ofrece muchisimo artisticamente, tanto desde el punto de vista del baile, gracias al buen hacer y al talento de la bailarina, hasta una gran satira de diferentes temas muy bien llevados a cabo por el mismo director de la obra, Mariano Aguirre. Una vez mas la troupe del cretino consigue sorprendernos con esa originalidad propia de todas sus interpretaciones.

Hay un tablao en el inifierno y lo hemos visitado!. Ayer descendimos al infierno, acogidos por satán visitamos una parte de esta cálida nación. A través de maléficos bailes e ilustres huéspedes descubrimos este destino...Risas y sorpresas garantizadas por la compañía infernal. Recomendamos a todo curioso que acuda a este viaje.

Espectáculo original e inteligente. Bajo un formato de actor y bailarina, se desarrolla una divertida obra en la que se satirizan algunos aspectos de nuestra infernal organización social y política. Las intervenciones de la bailarina dotan a la obra de un ritmo muy acertado entre teatro y danza. La originalidad del espectáculo.