Subprime - Un thriller trepidante

La actuación de Federico Aguado (Pablo), me pareció muy creíble. Creo que fue lo mejor de la obra. Pep Munné, a quien también vi en "casa de muñecas" estuvo bastante bien, a los otros no les conocía.

Es la primera vez que pro las entradas por Atrápalo y no me gustó tener que acudir la misma tarde de la función a coger las entradas. Intenté pasarme a recogerlas antes pero no hubo forma, y la verdad es que me hubiese resultado mucho más cómodo.

El uso de nuevas tecnologías refresca le montaje, enriquece la percepción de la circunstancia, le brinda una perspectiva mucho más amplia. El tema es interesante y la historia parece sacada de la prensa diaria.

Demasiada información para digerir en tan poco tiempo. No debería ser necesario que se entregue con el programa un glosario de conceptos para que el espectador comprenda la trama. Algunos actores fuerzan excesivamente su interpretación.

Los actores, de primerísima fila, la interpretación magnífica. 90 minutos que pasan a velocidad de vértigo dejándote pegado a la butaca desde el primer minuto. Los actores jóvenes tienen mucho que decir, habrá que darles oportunidades. podría seruna buena película.

En las primeras escenas el ritmo es tan rápido que como no has tenido tiempo de meterte en situación, cuesta seguir la conversación entrelos distintos personajes.

El guión es muy bueno y los actores hacen una interpretación estupenda. Es una obra bien trabajada y muy profesional y que te invita a reflexionar sobre nuestra realidad política.

Hay un detalle importante que desmereció un poco la obra y es que el sonido no era el adecuado. Hay muchos momentos en los que apenas se oía lo que hablaban y no se les podía entender con lo que perdías un poco el "hilo" de la obra.

La interpretación de los actores... Pep Munné, como siempre, estupendo. Y el otro actor más jovencito, no recuerdo el nombre, una gran sorpresa.

El escenario es demasiado grande y la estructura que define la oficina no permite la visibilidad. Además, en ese espacio tan enorme, cuesta entender a los actores, a pesar de que da la sensación de que se están desgañitando.

Es una obra muy diferente a las que estoy acostumbrada. Y la verdad que me gusto todo de ella. El juego de pantallas para contar lo que pasaba fuera, más allá de llamadas de telefono o la simple narración por parte de los actores en el escenario me pareció muy acertado. Salí encantada.

Es original la presentación audiovisual y bastante buena la interpretación de algunos actores.

Me desilusionó bastante. Está llena de tópicos ya conocidos y muy trillados. No aporta nada nuevo y, por desgracia, la interpretación de Pep Munne no es de las mejores de su carrera. No le va ese papel o no lo interpreta bien.

El tratamiento del tema, muy actual y representativo de lo que vivimos. El final es fantástico. Invita a reflexionar sobre diferentes maneras de luchar por nuestras ideas.

Extrañamente, el sonido es malísimo. He estado muchas veces en el Fernán Gómez y nunca ha sido tan malo. Hay trozos de diálogo que no se entienden

La mezcla de teatro y pantallas. Efectivamente, se puede convertir fácilmente en una película. Tema muy actual y da la impresión de representar muy fielmente la realidad del tándem políticos-mundo empresarial.

No logré entender todos los diálogos. El parlamento era excesivamente rápido y violento. Final un poquito esperpéntico, aunque puede valer como salida al conflicto planteado en la obra.

Los actores, sin duda alguna.

La obra, es lenta, y por momentos monótona el sonido no es bueno porque el decorado esta bastante atrás del escenario y eso que estábamos 4 en el teatro.