positivo:
Decoración de la entrada, el botones atento, los baños de abajo.
negativo:
Demasiadas deficiencias. A ver, el hotel está un poco lejos de Tánger, pero esto no es un verdadero problema porque por 20 dirhams (unos 2?) llegas en Petit taxi a cualquier parte de Tánger. Lo que realmente le falta al hotel es limpieza, una mano de pintura, orden. En cuanto llegamos nos abrieron una habitación erróneamente que estaba siendo utilizada por otra persona y lo primero que vimos fue unas manchas de humedad enormes!!! Y la pila del baño rota!!! Tanto es así que al abrirnos la habitación que nos tocaba nos pareció hasta buena. Se trata de habitaciones pequeñas con 3 camas (2 individuales y una de matrimonio), el suelo es de moqueta y está especialmente sucia por lo que andar descalzo es un deporte de riesgo, (tus pies podrían convertirse en una maravillosa placa petri donde crear tu propia colonia de hongos; este es un souvenir de Tánger, jajaja), si vienes a este hotel llévate sábanas propias, el edredón tenía manchas de sangre y otras que no quisimos averiguar. La única utilidad de la estufa (no iba, aunque era marca Ufesa, jeje) fue la de atrancar la puerta mientras dormíamos para evitar confusiones como la que tuvieron con nosotros al casi darnos una habitación ocupada, ya que la cerradura tiene la misma seguridad que una puerta de oficina o la de un baño normal (con una tarjeta de crédito podrías abrirla). Qué decir de detalles: el bidé (que sí, había) sucio, aire acondicionado terrorífico, el balconcito con bichos muertos y roña para matar a alguien o algo, recepción seca (correcta pero nada corteses, ni un mapa nos dieron).
Cosas buenas: los baños en general, tanto en la habitación como abajo, en recepción, muy limpios y aseados (exceptuando el bidé de la habitación que dije anteriormente arriba); el buffet de desayuno variado, abundante, agradable (cruasanes, napolitanas, jamón york, macedonia, zumo de naranja natural, café, leche, cereales, mermelada, etc.); el botones muy majo, atento, no era pedigüeño por lo que le dimos una propinilla, simpático, atento a las necesidades, etc.; las señoras de la limpieza simpáticas, sonrientes y respetuosas (estábamos durmiendo, llamaron para arreglar la habitación, se fueron y nos la arreglaron después); hay un seguridad muy majo que nos buscó taxi al llegar (bastante rato y arriesgando su vida pues cruzo varias veces la carretera y nos dio miedito por su seguridad);la recepción tiene una decoración bonita y varios salones y bares donde tomar algo. Si estás pensando ir a Tánger y quieres pasar los días en este hotel porque es económico, bueno, no te preocupes si no eres tiquismiquis y lo que quieres es tener donde dormir (nosotros somos jóvenes, estudiantes y sin dinero) no es tan malo si es la única opción que te puedes permitir. Hay que decir que el hotel no está muy en las afueras, tiene edificios, bancos, carretera e incluso una farmacia en las proximidades inmediatas. En conclusión, un hotel económico y con faltas más o menos graves de higiene. Las sabanas y toallas no tienen evidentes deficiencias higiénicas pero cuando haces balance de la situación general que te rodea, pierden fiabilidad. Fotos del hotel erróneas (por no decir fraudulentas) pertenecen a los primeros años del hotel (en torno a los años 60) y no hacen justicia a la verdad. Teniendo en cuenta que es un país con una economía muy baja no se puede pedir demasiado, aunque cuando piensas que el sueldo medio de un habitante de Tanger es de 4300 dirhams aprox. al mes y que la habitación costaba 280 dirhanms, en proporción es bastante cara y parece solo destinada a sacar dinero al turista. Limpieza, atención en recepción un poco seca,.
