Eufòria

Un pueblo que vivía galopando en la euforia eterna se vio amenazado por un final. No había nada que hacer para evitarlo. Cualquier intento de rebelarse producía el efecto contrario. Todo el mundo colapsó. La mayoría prefirió anticiparse y estallar antes de enfrentarse a un momento así. Quien se quedó tuvo que dar marcha atrás, atravesar un pantano bipolar y volver al principio para poder, al fin, asumir que se acabaría.

La obra es el viaje de un grupo de personas solas hacia un final compartido, a través de este mundo enfermo de euforia, que se promete infinito.

Lara Díez Quintanilla, autora residente de la Sala Beckett la temporada 2020-21, dirige Eufòria, el texto resultante de su residencia. La autora ha querido hablar de esta sensación, de este sentimiento de bienestar total que se mueve radicalmente en términos absolutos.

La euforia es como un huracán, donde está ella no hay nadie más y anula la posibilidad de encuentro real con el otro. Resulta enloquecedora cuando se convierte en un estado sostenido o en el objetivo final. Asimilarla como sinónimo de felicidad es nuestra enfermedad genética colectiva, porque transforma la vida en un contenedor de expectativas imposibles y en una fábrica de frustración interminable.


Autoría y dirección: Lara Díez Quintanilla
Reparto: Ramon Bonvehí, Marta Codina, Mireia Illamola Riubugent/Lara Díez Quintanilla, Laura Pau, Bàrbara Roig Grifoll y Marc Tarrida Aribau
En las funciones de los días 27 y 28/05, 2 y 3/06, Lara Díez Quintanila substituirá Mireia Illamola Riubugent.
Espacio e iluminación: Cube.bz
Vestuario: Laura Garcia Martos
Utillería: Camille Latron Llorens
Caracterización: Alice Del Bello
Música original, espacio sonoro y vídeo: Erol Ileri
Movimiento: Marta Tomasa
Fotografía: Kiku Piñol
Vídeo promocional: Raquel Barrera
Ayudante de dirección: Ramon Bonvehí Rosich
Apoyo en dramaturgia y dirección: Bernat Reher
Gracias a Martita, Maria, Gabi, Erol, Javi, Ramon, Bàrbara, Laura, Toni, Mireia, Marc, Laura, Bernat, Camille, Olivia, Alice, Marta y todas las personas que habéis hecho posible EUFÒRIA en la Sala Beckett. Gracias a mi tribu y hermandad de saliva y sangre VOLCÀNICA, a las polifonías en LA menor, al Ferran, al Sergi, a Ignasi, a Elisenda y a Àngels.
y el más infinito de los agradecimientos a Bernat.
Una producción de la Sala Beckett