La Bella de Amherst (Emily Dickinson)

sencillamente todo. desde el sitio en sí mismo, que goza de un encanto especial, pasando por la personas que te atienden a la llegada y a la salida, de una amabilidad que hoy en día cuesta tanto encontrar, la sala, tan íntima, tan acogedora... y por supuesto, la obra y la interpretación de maría pastor, respecto de la cual me cuesta encontrar un calificativo. creo que sublime se queda muy corto.

Nada.

Buen guión y puesta en escena y una magnífica interpretación. Esta propuesta de teatro en \"pequeño formato\" me resultó agradable y me pareció que había un ambiente muy familiar.

Todo bien. Lo mejor la interpretación de María Pastor, si pudiera le daría más de un diez.

Siendo una unica actriz no se me huzo pesada

Nada

Todo

Nada

Gratamente sorprendido porque alguien en algún remoto rincón de este país se acordara y nos trajera a la memoria los versos, el jardín y las estancias de la extraordinaria Emily y ese lugar no podía ser otro que La Guindalera.

Pequeñeces. Al tratarse de una obra de un solo personaje y ambientación, eché de menos más presencia de jardín, fuente de su inspiración: sonidos ambientales como alguna abeja zumbando y flores, más presencia de flores.

El personaje interactúa con el público todo el tiempo. Está muy bien esa forma en que nos cuenta su vida. Es una recreación que alterna pasado y presente de Emily en el presente del público. Me parece audaz la forma de contarlo. Muy buena la ambientación del escenario y de la protagonista. Importante destacar el espacio del Teatro de La Guindalera. No lo conocía, pero estoy segura de que repetiré.

La verdad es que todo. Desde el recibimiento hasta la despedida. El silencio. La complicidad de la artista con el público. todo fue estupendo.

Hacía un poco de calor y algún descerebrado, a pesar de la insistencia de los responsables del teatro, no apagaron el teléfono móvil. ¡lástima se perdieron una frase, seguro que una frase muy importante, porque todos lo eran. Ha sido un place.

Puesta en escena muy buena, interpretación excelente. Cercanía con el público

Monólogo biográfico intimista, en primera persona. Hubiera sido mejor en 3ª persona, va perdiendo fuerza la historia según va pasando el tiempo. La vida privada de Emily, no es en absoluto atractiva; por lo que narrado en 3ª persona captaría mejor la atención del público

Sobre un texto muy interesante que sigue la vida de la poeta americana Emily Dickinson, la actriz hace un monólogo de 1h30min sin interrupción, sin que decaiga en ningún momento. Para mi fue muy interesante, pero destaco la maravillosa interpretación como el elemento que sostiene todo el espectáculo.