Peribáñez y el Comendador de Ocaña

Peribáñez y el Comendador de Ocaña llega a la Plaza Mayor de Ocaña.

Hay dos días al año en Ocaña en los que el espíritu de Lope de Vega viste de fiesta y sale a las calles de la villa. El tiempo y el espacio retroceden al Siglo de Oro convirtiendo la Plaza Mayor de Ocaña en escenario de este drama histórico. Con su rúbrica en verso dispuesta, dejó en la memoria grabada, la historia que por bien narrada, hizo conocida la villa de Ocaña y a todo aquel que la mora.

Es la vieja Castilla, tiempo de conquistas, amores prohibidos y el yugo opresor de los señores feudales y comendadores, amos y dueños de la tierra y de sus gentes. Abren el telón de la Plaza Mayor para asistir como invitados a la boda de Casilda y Peribáñez, a la diversión de mozos, a la felicitación de amigos y parientes; al amor enfermizo del Comendador que busca en casa de los recién casados la deshonra. A clérigos, lacayos, reyes y traidores, pintores, damas de corte, músicos y labradores; soldados y pueblo que se revisten de honor, amor, poder, honestidad y justicia.

Te sentirás como un invitado en la boda de Peribáñez con Casilda. Pretenden que viajes a Toledo con sus personajes y te sumerjas en la Corte de Enrique III. Que disfrutes con los bailes y versos cantados por nuestros ocañenses y te estremezcas con el frío acero de la espada del Comendador. Todo esto y mucho más es Peribáñez y el Comendador de Ocaña.