1. Socotra (Yemen)

Más cerca de Somalia que de Yemen a pesar de pertenecer a este último país, Socotra es lo más parecido a una película de ciencia ficción. Una isla cuya mitad sur carece de electricidad y donde los cangrejos son gigantes, las playas de cuento y sus árboles se reparten en especímenes como el Sangre de Dragón o el Árbol Botella.

2. Charco Verde (Lanzarote)

Canarias es un archipiélago donde la naturaleza regala formas y lugares increíbles. El mejor ejemplo es el también conocido como Charco de los Clicos que yace en las inmediaciones de Yaiza, en Lanzarote. Una masa de agua verde en mitad de una playa volcánica resultado de los sedimentos que se colaron una vez por una grieta que conecta con el Atlántico. Imperdible.

3. Edificio Monstruo (Hong Kong)

Cuando un lugar del mundo aparece en una película como Ghost in the Shell, es que la cosa promete. Porque no sabemos si en otros planetas encontraríamos algo como el Edificio Monstruo de Hong Kong, pero que una futura colonia terrícola en Venus luzca así, no es tan descabellado. Sensación de Instagram y hervidero de mil culturas y colores, la Nueva York de Oriente es todo un deleite para turistas en busca de marcianadas.

4. Salar de Uyuni (Bolivia)

El lugar más fascinante del país boliviano podría ser considerado oficialmente como “el espejo del cielo”. Un salar de hasta 4 mil millas cuadradas cuya ubicación terrenal tan solo la delatan unos pocos flamencos.

5. Vaddhoo Beach (Maldivas)

En algún lugar al sur de las paradisíacas Maldivas existe una playa que, al anochecer, se convierte en un escenario digno de las futuras secuelas de Avatar. Una ensenada salpicada de virutas brillantes que responden al fenómeno de la biolumiscencia provocado por la presencia de una singular alga. Eso sí, verla es cuestión de suerte.

6. Montaña Arco Iris (Perú)

Bañada por unos colores similares a los de un vómito de unicornio (o de alpacornio en todo caso), la Montaña Arco Iris de Perú es todo un deleite para los sentidos más allá de atracciones típicas como Paracas o Machu Picchu.

7. Mano en el Desierto (Chile)

Si alguien hubiese rodado El Planeta de los Simios en el siglo XXI, la mano más famosa de Chile habría sido el motivo frente al que Charlton Heston lloraría gritando aquello de ¡Malditos! Ubicada al sur de la desértica Antofagasta, esta obra del escultor Mario Irarrázabal es todo un portento en mitad de un escenario no menos marciano.

Puede que estés ahorrando para comprarte un billete al espacio exterior. Pero si quieres ahorrar, quizás la Tierra pueda sorprenderte aún más.

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Alicantino de nacimiento, amante de cualquier lugar con mínimas de 25ºC. Mi debilidad es escribir en cafés secretos, tengo curry en las venas y una palmera tatuada (tiene su miga, aunque no lo parezca). Una vez gané un premio en Japón.