La Comunitat Valenciana también es para el otoño
La “tardor” es la cara B de la Comunitat Valenciana y está llena de planes y escapadas.
Todos sabemos lo que supone disfrutar de un verano en la Comunitat Valenciana, pero es mejor ser avispado y fundirse con sus secretos de otoño, especialmente gracias a puentes como el de noviembre. En la tardor, como se llama a esta época en la Comunitat Valenciana, entre el mar y la montaña florecen nuevas canciones, la fiesta de Todos los Santos huele a buñuelos y mazapán, y los carrascales se tiñen de colores.
En Dénia, el amanecer se siente junto a su famoso castillo y la “golden hour” se persigue en las playas de Les Rotes. Y avistar sirenas desde los portales azules de la Cala del Portixol, ahora tan libre de instagrammers, descubrir los secretos de antiguos contrabandistas a través de la Ruta de los Acantilados desde la Cala del Moraig o escalar el icónico Peñón de Ifach, en Calpe, es posible sin sudar la gota gorda.
Pero la costa valenciana es solo la excusa para perderse por el interior de las provincias de Alicante, Castellón y Valencia, donde puedes pedalear en bicicleta a través del suave sol de otoño que acaricia los riuraus, viviendas típicas donde se manipula la uva pasa. O para visitar pueblos como Chodos, un oasis rural de la provincia de Castellón donde iniciar una ruta de senderismo para terminar buscando el rastro de dragones en su castillo o la torre de El Callís.
Descender hacia el sur de la Comunitat Valenciana también implica dejarse caer por localidades como la impactante Xàtiva y la inconfundible silueta de su castillo, cuna de dos papas de la icónica familia de los Borgia. Desde la fortaleza encaramada sobre la sierra de Vernissa hasta los matices de una cazuela de arroz, Xàtiva se come, se siente y te envuelve en historia para llevarte a otros lugares, a otras épocas.
Quizás puedas adentrarte en el antiguo período musulmán que evoca como pocas Requena, pueblo valenciano que combina los restos de una antigua Medina con sus murallas. O hacer un alto en el camino para llegar hasta la Sierra de Mariola, conquistada por las pisadas de sus antiguos neveros y seguir el aroma del turrón en Jijona, donde quedará confirmado que la Comunitat Valenciana es el paraíso de la Navidad. Incluso podrás seguir en dirección contraria y deleitarte con la Feria de Cocentaina, el evento al que apuntan todas las miradas en la víspera de Todos los Santos.
El próximo puente de noviembre tienes una cita en la Comunitat Valenciana, donde el otoño es historia, naturaleza y gastronomía. Donde la magia de la tardor comienza cuando se apagan las luces del verano.