Me Mata Teatro sigue triunfando en las salas de Madrid con esta revisión del clásico de Antón Chéjov en versión ibérica y actual, en la que sus protagonistas, Nina y Kostia, ejercen de maestros de ceremonias de una puesta en escena minimalista y perfecta en la que no se necesita nada más que dos jóvenes actores para mantener la tensión y emoción de la trama durante toda la obra.

Víctor de Castro y Sofía Vera narran con abrumadora potencia desde una austeridad escenográfica la misma historia desde dos puntos de vista distintos, casi opuestos, reflejando así la dualidad propia del ser humano. 

Dos caras de la misma moneda que representan el drama, al más puro estilo shakespeariano, de las luces y sombras del ser humano. Como todos los grandes dilemas de la humanidad sobre la moral, el destino o el amor, esta nueva versión tiene la misma vigencia e interés que la original La Gaviota, estrenada hace más de un siglo.

A lo largo de este relato, los dos actores afrontan sobre el escenario, con una profundidad y madurez pasmosa, temas tan universales como la búsqueda de cariño y la aprobación de los demás, la lucha descarnada por la supervivencia, las pasiones más bajas que se esconden tras una apariencia de normalidad o la certeza vital de que todo tiene su fin

Estas cuestiones nos remueven por dentro y penetran en el alma del espectador durante los 90 minutos que dura la función, haciendo imposible desconectar en ningún momento de la historia de estos dos jóvenes que ven cómo su mundo, aparentemente tranquilo, acababa dinamitado por la dureza y el inexorable paso del tiempo y de la vida misma. 

Una experiencia teatral íntima y maravillosa que solo podréis entender si vivís en primera persona. Ahora tenéis una nueva oportunidad de verla en el Pasillo Verde Teatro, en Madrid, del 22 al 29 de mayo.

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No te tomes tan en serio, nadie más lo hace.