Jordi en el Absolut Ice BarRecientemente fuí amablemente invitado por la organización a asistir al Internet Marketing Conference que tendría lugar en Estocolmo los días 29 y 30 de noviembre.

La verdad es que pintaba interesante y Escandinavia siempre ha sido uno de mis destinos en cartera, así que decidí no perder la oportunidad de asistir al evento, y de paso visitar una de las ciudades más bellas de Europa.

La pena es no haber tenido más tiempo. Con la mayoría de mi viaje ocupado encerrado en una sala llena de gente trajeada, apenas tuve tiempo de poner en práctica mi innegable habilidad para perderme. Eso sí, pude comprobar que Estocolmo es una ciudad muy bella, con rincones muy románticos y plazas en las que sentarse un buen rato y dejarse invadir por esa tranquilidad rezuma. Es de esas ciudades que a pesar de tener una frenética actividad comercial, no pierden la personalidad y el encanto que le dan las piedras, testigos del brotar de la cultura.

Es el lugar perfecto para sentarse en una terracita al aire libre y leer un libro, aunque esté nevando. Yo lo hice y no era el único, aunque quizas sí el único que lo hacía y no era sueco… Y nada mejor que un buen vaso de glögg para rematar la experiencia.

Pero no todo es paz y sosiego en la capital sueca: cuenta con decenas de locales de moda (las tendencias son marcadamente fashion) y como todo buen guiri que se precie, fuí a pasar media horita larga en el afamado Ice Bar, antes de volver al hotel a degustar una típica cena sueca a base de ciervo y salmón.

En cuanto a la conferencia, muy educativa y con algunas intervenciones brillantes. Evidentemente, tuvo una gran representación nórdica, por lo que la participación de profesionales de lugares más exóticos (como Barcelona), despertaba bastante interés. No entraré en detalles por aquello de no aburrir (a quien quiera más detalles estaré encantado de responder a cualquier pregunta, poneos en contacto conmigo), pero de allí salieron ideas que pronto se convertirán en notables mejoras en la web de Atrapalo.com, principalmente para mejorar la usabilidad y hacer que sea más sencillo encontrar el martillo con el que romper la gélida rutina.

En fin, una visita muy grata y muy edificante, que espero poder repetir con más tiempo (quizas un “road trip” el verano próximo), porque esa gente y su tierra bién lo merecen.

Jordi en el Absolut Ice BarRecientemente fuí amablemente invitado por la organización a asistir al Internet Marketing Conference que tendría lugar en Estocolmo los días 29 y 30 de noviembre.

La verdad es que pintaba interesante y Escandinavia siempre ha sido uno de mis destinos en cartera, así que decidí no perder la oportunidad de asistir al evento, y de paso visitar una de las ciudades más bellas de Europa.

La pena es no haber tenido más tiempo. Con la mayoría de mi viaje ocupado encerrado en una sala llena de gente trajeada, apenas tuve tiempo de poner en práctica mi innegable habilidad para perderme. Eso sí, pude comprobar que Estocolmo es una ciudad muy bella, con rincones muy románticos y plazas en las que sentarse un buen rato y dejarse invadir por esa tranquilidad rezuma. Es de esas ciudades que a pesar de tener una frenética actividad comercial, no pierden la personalidad y el encanto que le dan las piedras, testigos del brotar de la cultura.

Es el lugar perfecto para sentarse en una terracita al aire libre y leer un libro, aunque esté nevando. Yo lo hice y no era el único, aunque quizas sí el único que lo hacía y no era sueco… Y nada mejor que un buen vaso de glögg para rematar la experiencia.

Pero no todo es paz y sosiego en la capital sueca: cuenta con decenas de locales de moda (las tendencias son marcadamente fashion) y como todo buen guiri que se precie, fuí a pasar media horita larga en el afamado Ice Bar, antes de volver al hotel a degustar una típica cena sueca a base de ciervo y salmón.

En cuanto a la conferencia, muy educativa y con algunas intervenciones brillantes. Evidentemente, tuvo una gran representación nórdica, por lo que la participación de profesionales de lugares más exóticos (como Barcelona), despertaba bastante interés. No entraré en detalles por aquello de no aburrir (a quien quiera más detalles estaré encantado de responder a cualquier pregunta, poneos en contacto conmigo), pero de allí salieron ideas que pronto se convertirán en notables mejoras en la web de Atrapalo.com, principalmente para mejorar la usabilidad y hacer que sea más sencillo encontrar el martillo con el que romper la gélida rutina.

En fin, una visita muy grata y muy edificante, que espero poder repetir con más tiempo (quizas un “road trip” el verano próximo), porque esa gente y su tierra bién lo merecen.