No, no aprendiste a hacer buen pan en la pandemia
¡Atención, personas estresadas!
Si alguna vez has sentido que tu vida necesita un reajuste, como si fueras un móvil con 1% de batería y sin cargador a la vista, tengo una solución: la comedia; «Una terapia integral». Sí, has leído bien. Pero no es lo que piensas. Aquí no hay música zen ni velas aromáticas, pero sí hay risas, y muchas.
El Espectáculo: Pan y psicología para llevar
Hace unos días estuve en este espectáculo de Madrid. Como buena escéptica de las «terapias integrales» (porque, vamos, ¿qué se supone que significa eso?), me lancé a la aventura sin saber muy bien qué esperar. Me imaginaba algo entre una clase de yoga con un gurú chamánico y un curso intensivo de respiración consciente, pero por las fotos del cartel, también algo similar al concurso “Master chef”. Vamos, no sabía dónde me metía.
Pero lo que encontré fue una terapia para la mente… ¡y para los abdominales! Y no precisamente por los ejercicios, sino porque no paré de reír y reflexionar.
Amasando la vida real
Desde el primer momento, te das cuenta de que no es la típica comedia. Los actores, que más bien parecen panaderos en una misión de paz interior, y consiguen que te sientas como en la cocina de tu abuela, ¡pero con más chistes y menos reproches por no haber llamado más seguido!
Entre bromas sobre la vida moderna, el estrés laboral, las relaciones de pareja, críticas sutiles a las modas alimenticias, y momentos de honestidad desarmante, los actores van desgranando las capas de sus personajes (y, de paso, las tuyas). No sabes si reírte porque te está haciendo realmente gracia o porque es incómodamente cierto.
El Pan no siempre sale bien… Y Eso está bien
No quiero spoilear demasiado, pero te diré esto: al final del espectáculo, te das cuenta de que, así como el pan que intentas hacer en casa a veces no sale como esperabas, la vida también es así. Y eso está bien. No podemos tener bajo control todo lo que nos sucede alrededor.
Y con esta reflexión os dejo, ¡ya puedes volver a tu vida normal! Hasta la próxima.
