Estambul

Turquía

Mitad europea, mitad asiática. Así es Estambul, una ciudad dual con posibilidades infinitas que, además de ser rica en gastronomía, es una joya turística con planes que mezclan el mundo occidental con el árabe. Indispensables son los cruceros por el Cuerno de Oro y por el Bósforo a los que se suma una cita clave: La final de la UEFA Champions League, que se jugará el 30 de mayo de 2020 en el Estadio Olímpico de Atatürk.

Luxemburgo

Su centro histórico, ubicado sobre un acantilado, es conocido como “El Balcón de Europa”. Fuera de la almendra central, los castillos medievales y las gargantas rocosas rodean preciosos pueblos con los que vivir la auténtica cultura luxemburguesa.

Galway

Irlanda

Esta ciudad de la costa oeste de Irlanda es conocida por su creatividad artística, por lo que no es de extrañar que haya sido nombrada como Capital de la Cultura Europea en 2020. En la parte antigua, donde tiendas y cafés tradicionales llenan de bullicio sus calles, también se encuentran sus conocidos pubs con música en directo y lugares de parada obligatoria como la muralla o el Arco Español. En la agenda nunca faltan propuestas gastronómicas protagonizadas por el marisco y el pescado fresco o sus famosas carreras de caballos, que se celebran en verano.

Hallstat

Austria

Dicen que es el pueblo más bonito de este país. Abrigado por imponentes montañas verdes y rodeado por un majestuoso lago, esta villa ofrece paseos en barca, visitas a las antiguas minas de sal y cuenta con una réplica exacta de sus callejuelas adornadas con flores en una región de China.

Edimburgo

Escocia

Un entorno urbano repleto de restaurantes, galerías y museos que combinan a la perfección con románticas ruinas y paisajes escarpados de costa donde respirar aire puro. Su vida nocturna y las visitas al Lago Ness son dos must have para la agenda viajera que acompañe esta escapada. Edimburgo destaca por sus historias de fantasmas: realizar un tour por el Edimburgo más oculto es algo obligatorio.

Sarajevo

Bosnia

Viajar a un territorio en forma de corazón ya indica que el lugar tiene alma. En esta ciudad todavía se respira influencia austrohúngara y su laberinto de calles y patios peatonales con pavimento de mármol invitan a perderse hasta buscar un descanso en alguno de sus cafés.

Brujas

Bélgica

Visitar la capital del reino de Flandes Occidental es como hacer un viaje a la Edad Media. Al pasear por sus calles de piedra, es fácil imaginarse cómo vivían los brujenses en una ciudad que también es conocida como la Venecia del norte. Las mejores vistas las ofrece la Torre Belfort, que tras subir y bajar sus 365 escalones, invitará a reponer fuerzas desgustando los típicos mejillones con patatas o deliciosos gofres. Los bombones de auténtico chocolate belga mejor echarlos en la maleta de vuelta para hacer frente a los ataques de nostalgia cuando ya no estés allí.

Oporto

Portugal

Romanticismo, decadencia y, a la vez, vida. Mucha vida en torno a la ribera del Douro y al arte que brindan las galerías de la calle Miguel Bombarda. Esta ciudad continúa siendo un destino top, donde la francesinha y el Café Majestic se encargan de dar el punto diferencial a la parte gastronómica. Visita las bodegas situadas en Vilanova de Gaia.

Burdeos

Francia

Noches de vino y ostras o cómo disfrutar del esplendor del siglo XVIII en 2020. Ese es el plan que ofrece Burdeos, una ciudad que preserva toda la magia de épocas pasadas en el Barrio de Saint Pierre y, a su vez, impacta con propuestas contemporáneas como el Espejo de Agua o la Cité du Vin.

Turín

Italia

La capital piamontesa es perfecta para un fin de semana porque puede recorrerse sin prisas. Con un rico patrimonio arquitectónico y cultural que alberga uno de los museos egipcios más importantes del mundo, calles secretas y las mejores propuestas de aperitivo para reponer fuerzas, esta ciudad se convierte en uno de los principales destinos para este año. Además, cuenta con uno de los equipos de fútbol más reconocidos de Europa, la Vechia Signora, la Juventus de Turín.