Preludio
Madrid
25/02/2019
"La vida en 90 minutos"
Se habla de "encarnar" a un personaje cuando se interpreta. En este caso, Daniel Ortiz va mucho más allá: ama, sufre, ríe, llora con el personaje, se mimetiza con él. Leon de Vega, el pianista atormentado y obsesionado y, precisamente por ello, auténtico, real y especialmente lúcido, nos conduce, a través de los preludios de Chopin (infinitos, eternos) a lo largo de una vida auténtica, cargada de excelentes reflexiones, de verdad. Imposible no emocianarse. Extraordinaria puesta en escena.
¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?
Que siguieran apostando por joyas así, que hacen mucha falta.
¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?
Que me ha emocionado y aún tengo los pelos de punta
Positivo: Todo: interpretación, guión, puesta en escena...
Negativo: Nada, que no dure más