La Novia de A. Chejov

Genera inquietudes en el espectador. Al principio, no me terminaba de convencer. Al tratarse de la adaptación de un relato corto, había momentos que resultaban un poco extraños al espectador, pues el actor narraba lo que hacía en lugar de hacerlo, y, al menos a mí, se me hizo raro. Sin embargo, creo que el contenido sostiene de sobra la obra. Chéjov está presente y se nota. O más bien, se siente. El proceso que vive Nadia es complejo, es perturbador. Y llama más la atención que ya en el XIX se cuestionase una Institución como el matrimonio. Era revolucionario para la época y lo sigue siendo hoy en día. Cuando Shasha pregunta "¿para qué casarse?" uno no sabe muy bien qué responder. Pone de manifiesto el absurdo del acto, lo evidencia más que cualquier argumentación enrevesada. El verdadero amor es sin duda el que Shasha deja en Nadia, a quien hace revivir y enseña a volar. En definitiva, lo que yo entiendo que es el amor más bello. Y por eso uno abandona el teatro vivo, porque la semilla ha dado sus frutos en el espectador. El contenido,la puesta en escena, la evolución de la actriz y del personaje de N.

En ciertos momentos, la interpretación se me hacía rara, poco natural.

Adaptación problemática. Una obra de este calibre requiere una adaptación que realmente sea una adaptación. Recitar en verso para adelantar el devenir de la acción, en mi opinión, sólo se puede hacer cuando el discurso es creído firmemente por los actores, ya sea porque han internalizado la poesía o porque se les ha adaptado a un lenguaje en el cual se sienten más cómodos. Esto no sucede en la adaptación y dirección de Ángel Gutiérrez. El movimiento en escena de María Muñoz, así como las diferentes expresiones que pone para mostrar su cambio de percepción personal, familiar y social, son magistrales. No así su dicción, que resulta extremadamente forzada (por ejemplo, un empecinamiento en pronunciar bes y uves como uves, algo irreal en el español hablado normal). Los movimientos de Chema Coloma, por su parte, resultan sobreactuados. Consuelo Montoya es muy correcta en su papel de madre. Escenografía e iluminación excelentes, y apropiada elección musical, incluyendo las canciones en ruso y la música grabada.

Una novia poco decimonónica. La Novia, tal y como parece desprenderse del programa que puede recoger uno a la entrada del Teatro de Cámara, es un espectáculo inspirado, fundamentalmente, en el personaje principal del relato largo de Anton Chejov, "Una historia aburrida". Sin embargo son solamente las ideas y puntos de vista del personaje los que se toman para contar la historia, puesto que la trama es un compendio de situaciones y conflictos propios del teatro y narrativa de Chejov, concentrados en dos personajes: Sasha, un joven tuberculoso y entusiasta, que cree en el valor del trabajo, y del conocimimento, y Nadia, la novia del título, que deberá rebelarse contra su inminente casamiento para tomar las riendas de su propia vida y encaminarla hacia un horizonte más noble que el que le espera como simple esposa de clase alta. El conflicto no es nuevo, pero se adivina en el autor la intención de ir más allá de la anécdota que cuenta: Nadia somos todos, en un momento u otro de nuestas vidas. La interpretación de la protagonista.

Demasiado largo el silencio final en el columpio.

Con buena visión de teatro. El Teatro de cámara es un teatro más o menos pequeño, digamos íntimo. Tiene lo justo para poder representar las típicas escenas que ocurren dentro de una casa, o en cualquier sitio cerrado. Pero lo increíble es lo que da de sí ese pequeño rincón, pues la dirección ha sabido montar efectos como la lluvia o la luz de una manera tan realista que no miento si uno cree que está viendo la escena en carne viva. Esta visión del teatro, de una manera algo cinematográfica, se culmina con la actuación de los actores, y fíjense, sólo hay tres actores, y ellos solos sacan una cantidad de escenas de una magia increíble, que puede durar un minuto (pues la obra no da más de sí) pero que hacen que eso que parecía tan pequeño y simple se convierta en algo inmenso y colosal. La actriz María Muñoz y el actor Chema Coloma hacen una interpretación increíble, no solo a nivel de actores, sino como narradores continuos de la obra. Si vuelve a hacerse un montaje parecido, lo recomendaría ver sin pensarlo. La escenografía. La adaptación teatral.

Obra de arte. Hablar de arte y teatro sin haber visto "La Novia" del Teatro de Cámara Chéjov es como hablar del universo sin haber mirado hacia arriba. Una obra magnífica, un texto con un mensaje tan real como penetrante y contemporáneo 150 años después. Unos actores que te atraviesan el alma; virtuosos. La luz, la música, la atmósfera, los detalles: la dirección... PERFECTA. Un "todo" acabado de construir y con fuertes e inabatibles cimientos. Nunca he visto una obra de arte como esta en otro sitio. Lástima que ayer terminase porque volvería a verla mil veces. Bravo por el equipo que la ha compuesto, y gracias por haberlo hecho. Todo, hasta el minimo detalle. Es perfecta.

Que ayer fuera la última función.

Puro vitalismo. La función es muy buena tanto en lo referente a la interpretación de los actores como al tratamiento del tema de la obra de chejov. en el curso de la misma hay una progresión muy clara, de iluminación vital y liberación no sólo del personaje principal (nadia) sino también de los de su entorno la madre. El sentimiento de crecimiento interior que transmite la actriz está muy bien logrado, y muy bien interpretado el apasionamiento por la vida de sasha que es contagioso. da gusto disfrutar de mensajes tan optimistas y tan vitales en nuestros días y de creencia y ensalzamiento de la persona al margen de sus circunstancias particulares y el entorno social que nos constriñe tantas veces.

Maravillosa obra, magnífico el trabajo de los intérpretes y excelente el montaje. Queda claro nuevamente, que "menos es más". Mimoso el cuidado de el vestuario, la escenografía, luz y música. Desconocía la sala y el trabajo de éste director. Seré cumplido seguidor a partir de ahora, pues además de que la sala tiene muchísima magia y es deliciosamente acogedora, la honradez con que afrontan el trabajo, se ha ganado mi confianza. Tanto el director como los intérpretes saben muy bien lo que están haciendo y dan lo mejor. Será un placer ver madurar a estos jóvenes intérpretes. Gracias por abonar el teatro de esta manera. Jorge. Todo.

Transmite y atrapa. Muy bien adaptada.Excelente puesta en escena. De inmediato me sumergí en la historia y me dejé llevar por los actores y me trasladaron a la época. Consiguieron que me sintiera identificado con cada uno de los personajes y sus circunstacias vigentes a día de hoy. Me gustó. Me pareció elegante y bien pensada (la adaptación), con mucho trabajo detrás por parte de todos (producción, iluminación y sonido -la música es preciosa y muy bien escogida-, escenografía y actores). La recomiendo!. La puesta en escena.

Quizás desvelan demasiado en el programa al entrar.

Agradable Sorpresa. Aunque al principio la actriz parecía un poco "mema" o cursi, y me hizo temer lo peor, con el transcurso de la acción, te das cuenta, que precisamente tenía que ser así para llegar a ver su transformación, y comprobar su evolución, hacia la madurez emocional. Es una obra muy amena, que se hace muy corta y que, sin duda, te deja buen sabor de boca, y material de sobra para conversar a la finalización de la misma. Muy Recomendable!. La temática de la obra.

El frío de la sala.

Interpretación Muy Buena, pero...Teatro pequeño y muy cómodo e íntimo, con cercanía a los actores. Que interpretan genialmente la obra, incluso con lágrimas en los ojos..La ambientación e iluminación es excelente. Pero la lucha interior de los actores, se hace repetitiva y a veces hasta pesada. La historia no da mucho de sí y el número de actores que participan son solo 3, y se simultanean poco durante la obra. Ambientación e Interpretación.

La historia y la forma de enfocarla.