Alfonso Mora presenta a su ciudad las canciones de su segundo trabajo discográfico bajo el nombre de Libélula incrédula, acompañado por los productores del disco Santiago Noriega y Joan Bérenguer.
Alfonso Mora presenta a su ciudad las canciones de su segundo trabajo discográfico bajo el nombre de Libélula incrédula, acompañado por los productores del disco Santiago Noriega y Joan Bérenguer.
Libélula incrédula es un disco sincero, personal, dónde el autor encuentra un camino más parecido a un futuro que todavía cree pendiente de construir.
Mora 'se viste de abril' e intenta transformar en cada acuerdo este 'laberinto de espejos de hería, el adiós que apenas recuerdas, la eructa guitarra sin cuerdas'. Y desde este mundo interior de espejos, de elecciones, de melancolía y 'garabatos dibujados cono poca tinta' nos abre las puertas a un nuevo mundo, su mundo.
Mora nos propone pasar un rato por este universo de doce canciones que se muestra infinito en colores, significados y emociones. Muchas veces se oye decir que `para todo el mundo, aquello que es suyo es el más importante´. Y es que al final, la vida se reduce a esto, a aquello que nos importa y a aquello que no, a las cosas que nos gustan y a las que no. Y con este nuevo disco, Mora gusta, Mora importa y Mora consigue que lo suyo también sea lo nuestro. Porque como bien dice: `sólo intento ser feliz´. Quizás hoy lo consiga.