Anthony Blake - Jekyll & Hyde, en Madrid

La vida del eminente Dr. Jekyll, sus aptitudes como mentalista, como genio de laboratorio donde acaba de encontrar la pócima que le convierte en otra persona, el diabólico Mr. Hyde. Tres bellas mujeres compartirán esta espectacular historia junto a él. Música original, audiovisuales de última generación, ilusionismo. Tensión que mantendrá al público pegado a su butaca con momentos de gran espectacularidad. Una producción diferente, moderna e impactante.

Nos encontramos en un teatro en donde tres bellas chicas nos van a ir introduciendo, mediante canciones, en la vida del eminente Dr. Jekyll. Conoceremos sus aptitudes como mentalista, como genio en su laboratorio donde acaba de encontrar la pócima que le convierte en otra persona: en el diabólico Mr. Hyde.

Mr. Hyde es un monstruo, lo demuestra en su trato con las mujeres y con el público asistente, mediante su poder sensorial consigue descubrir los más íntimos secretos de la gente que le envuelve.

 

Jekyll perfecciona el descubrimiento y consigue no transformarse en otra persona, sino que sea su mente la que cambia… Y así sin pasar de un estado a otro Hyde hace su aparición cuando Jekyll menos se lo espera… Y lo peor es que no consigue recordar de lo sucedido mientras era Hyde.

 

Con la ayuda del público y de una máquina inventada por el que recoge imágenes de sus viajes nocturnos como Hyde, consigue descubrir que entre estas imágenes se oculta un nombre: “Jack”.

 

De este modo se aterroriza al conocer que en realidad Hyde no es otro que el célebre Jack el Destripador… Jekyll intenta una y otra vez acabar con su propia vida, pero Hyde se lo impide riéndose de él. Ha dominado su cuerpo y su mente por completo. Y lo que es peor, es posible que a través de la transmisión de pensamiento se haya ocultado en la mente de algunas personas del público. Desesperado Jekyll, pide la colaboración del más insigne detective de la época para averiguar en qué mentes se esconde Hyde y su alias Jack.

Aparece, así en escena Sherlock Holmes. Que mediante juegos de mente y predicciones consigue descubrir todo el misterio: todos somos Jekyll & Hyde. La función termina y Anthony Blake agradece al público su asistencia y su colaboración en los juegos que ha ido practicando… Juegos inofensivos, divertidos… Pero que encierran la gran enseñanza que Robert Louis Stevenson nos dejó como legado: Jekyll & Hyde siempre fueron la misma persona… al igual que lo somos todos nosotros.