El privilegio de ser perro

Soy catalana, y este sábado tuve la suerte de poder ver esta obra, imprescindible para todas aquellas personas que no son insensibles a las injusticias, a las que piensan que nuestros esfuerzos por cambiar las cosas pueden dar sus pequeños, pero necesarios frutos. Impresionante la actuación de Alejandro Botto y de Ernesto Arango, y cómo no, los textos de los monólogos, que hacen pensar, e incluso (como en mi caso) llorar. Felicidades, Juan Diego.

Me gustó mucho. Está tratado el tema de la inmigración con una gran sensibilidad. Los actores están muy bien, y el escenario de las maletas con toda la simbología que encierran también. Sería buenísimo poder llevarla al ámbito educativo, actuar en institutos, etc. donde hace tanta falta que se tome conciencia de este tema, no solo por parte de alumnos sino también de profesores, que tan llenos de prejuicios suelen estar.

Un montaje sencillo y sin embargo capaz de transmitir toda la emoción,sensibilidad e inteligencia que contiene el texto original.Los actores maravillosos. Felicidades a todos los que de una manera u otra han participado en esta obra y gracias a Juan Diego Botto por el espejo en el durante un breve pero intenso espacio de tiempo nos vimos reflejados como seres humanos.

Desde que ví un artículo sobre él en prensa,tenía muchas ganas de ir a verlo, me gusta mucho Juan Diego y tenía curiosidad por ver qué es lo que había escrito...Realmente impresionante, me ha hecho sentir y reflexionar. Mi más sincera enhorabuena a Juan Diego, espero que esta sea la primera de muchas, a Alejandro (excelente) y a Ernesto.

Me emocioné mucho!!! Yo tambien soy imigrante. Europeu de la UE, pero me identifiqué mucho con el texto, pues he vivido situaciones similares. La escenografia me encantó. Y que decir de los actores??? Fantásticos, me hicieron reir, llorar, indagar... Que gusto!!!.

Sencillamente ... genial. La mejor obra que he visto en mucho tiempo. Buenísimo el guión y los actores, sobre todo el actor principal. El actor secundario también está muy bien. Muy, muy recomendable. Y lo mas importante, no te deja indiferente. salí con u buen sabor de boca, eso (por desgracia ) pasa poco.

Realmente emocionante! ojala esta obra llegue a más gante y haga cambiar a más de uno y nos haga más solidarios, e incluso que intentemos cambiar un poco el mundo, aunque sea las simples cosas del dia a dia....Enhorabuena a Juan Diego Botto, por supuesto, a los actores!.

El privilegio de ser perro es una ventana abierta a la realidad, al mundo. Te adentras en una pequeña sala y a través de cuatro monólogos reflexionas sobre la privilegiada vida que te ha tocado y cómo están los demás. Es una obra que te da mucho a cambio de nada.

Me encantó la obra, me hizo reir y llorar. Los monólogos muy críticos, representando una realidad muy dura. El entorno, la sala Mirador, perfecta para su realización, tan auténtica como la obra, puro teatro. Encantada de haberla visto.

Simplemente genial!!! Una obra que te hace pensar y comentar cómo está el mundo, cómo es el ser humano...