Enrique VIII, de William Shakespeare

Excelente. Excelentes los actores, el ritmo de la obra, la puesta en escena, el vestuario , la música. Una obra redonda sobre el poder.

Que no hubiera pausa, el movimiento de los personajes en general y los cambios d escena

La obra no es demasiado buena, pero así y todo la interpretación parece más teatro del siglo de oro español que drama histórico inglés (Buckingham fue atroz, y el último valido religioso del rey, nuevo arzobispo de Canterbury, aún peor)

La interpretación de varios actores, sobre todo el personaje de Catalina de Aragón.

La producción, que me pareció un poco modesta y sobre todo que son dos horas de espectáculo y las butacas son incomodas.

Que los actores se dejaron la piel en el escenario.

La escenografía y vestuario son muy muy pobres, supongo que por el escaso presupuesto con el que juega la obra.

Los actores

Diálogos de Catalina de Aragón e interpretaciones de ella, Enrique VII y Wolsey.

OJALA LOS COMENTARIOS FUERAN MEJORES Y FIABLES. Qué complicado es valorar la cultura!! De eso no cabe duda cuando miramos los comentarios de otras personas para elegir qué ver...Vimos buenos comentarios sobre Enrique VIII y fuimos a verlo ya que leímos en el teletexto de tv que se había estrenado en el Globe durante los JJOO. Es una obra bastante fiel a la historia real del personaje; una representación bastante particular por la inclusión de momentos musicales, que pueden gustarte más o menos, eso ya es particular. A nosotros nos dejaron fríos. Nos gustaron mucho los personajes de Wolsey, Enrique VIII y Catalina de Aragón, que me parece que tiene los diálogos más logrados de todos los personajes. Había mucho juego irónico en sus diálogos y representaban a la perfección las intrigas palaciegas de la época. Algunos secundarios nos parecieron bastante mediocres. Son dos horas ininterrumpidas que se nos pasaron muy rápido. Nota final: normal, ni nos enamoró ni nos decepcionó. Los momentos musicales y ciertos secundarios.

FLOJITO RESULTADO ARTÍSTICO. Conformismo por parte del aforo que aplaudió con entusiasmo al final de la obra. Lamentablemente para los que hemos tenido la oportunidad de conocer a grandes nombres -Pellicena, Dicenta, Rodero,etc.-,la declamación resulta en general bastante pobre, lo que parece que es una constante en la escuela de teatro actual. ¿No hay nadie que les enseñe los matices de la voz? A decir en lugar de gritar... A sugerir en lugar de mascullar... La reina Catalina debe mejorar la importación de la voz a fin de que su papel llegue a todos los rincones de la sala y consiga dar a su diálogo la fuerza que ha de tener este personaje tan brillante.

Excelente elenco. A destacar el trabajo de la excelente compañía teatral, puesto que la obra es densa y el texto arduo. La puesta en escena me ha parecido un poco plana, me hubieran gustado más elementos que sorprendieran, como la escena final, que es magnífica. La actuación de la mayoría de los actores, en especial Catalina de Aragón.

Escasa imaginación en la puesta en escena.

Mucho ruido y pocas nueces. Por seguir en la línea de D. William; aún así no estuvo mal si no se tenían más pretensiones que pasar la velada con los amigos. Muy buenos, sobre todo, Catalina de Aragón y el Duque de Bukingham.

No es por el espectáculo propiamente pero el teatro no tiene aire acondicionado.