Las amargas lágrimas de Petra von Kant

Las comparaciones son odiosas, pero es inevitable acordarse de la película de Fassbinder con cada frase. La actriz que interpretó a Petra me gustó bastante, no así como la que hizo de Karin, versión fuencarraleña de una Hanna Schygulla con demasiada clase y estilo como para ser versionada. El climax dramático de la película fue totalmente descafeinado sobre el escenario, generando risas y perdiendo el sentido cruel de la historia original en virtud de una comedia llena de chascarrillos.

Fuí a verla por el texto de Fassbinder, que me encanta. No me gustaban nada las fotografías, así que fui con miedo y la obra me pareció bastante recomendable. Buen trabajo actoral, aunque no excepcional, y interesantes ideas de dirección; me sobraron algunos momentos obvios y gratuitos,de la puesta en escena. La versión me resultó más acortada o precipitacada que cuando la había leido. Pero en general, un buen trabajo y una oportunidad de ver,representada, esta fantástica obra.

Luchy (no recuerdo el apellido ahora) está fenomenal, tiene una enorme presencia escénica. El trabajo de Natalia Méndez me parece bueno también. Las otras actrices juegan en otro registro, casi de caricatura y la verdad, no se entiende por qué. Será culpa del director y creo que efectivamente no se transmite toda la tragedia de esta mujer que busca su identidad y rechaza las imágenes de ella que ve a través de las mujeres que la rodean... ¡¡son lágrimas AMARGAS!! Y aquí se ven (sólo) lágrimas.

Me invitó mi hija y se lo agradezco desde aquí. Tenía el recuerdo de una película lésbica, transgresora en su tiempo. Pero esa es la anécdota. Se reflexiona sobre el amor posesivo, el amor libre, el primer amor, etc y, lo más importamte, sobre la misión que tenemos los padres con nuestros hijos en la educación sentimental. A ella le gustó el personaje de Karin, claro, ese espítitu libre. A mi me enterneció esa madre que no le dio todo a su hija excepto el amor maternal. Ahí está el problema.

La adaptación de la obra es bastante buena pero sin duda, lo más llamativo es la originalidad de su puesta en escena: totalmente transgresor. la actriz que sobresale es la protagonista, sin desmerecer al resto, si bien el papel de Marlene, a pesar de su impenitente mutismo que no es óbice para restarle expresividad al personaje, se reparte el peso de la trama. Sólo el desnudo de Karim se encuentra ligeramente fuera de lugar. Trata el lesbianismo de un modo exquisitamente elegante. Merece la pena.

No me ha dejado mal sabor, aunque las actrices no me han parecido creíbles del todo.Petra es una bellissima mujer con una importante presencia escenica, un poco floja al principio, gana a medida de que aumenta el dramatismo. Karin me ha gustado bastante pero también por su belleza andrógina, perfectamente lograda, más que actuación. Buenísima la criada,me ha trasmitido mucho sin decir ni media palabra. Mucho más cautivante la segunda parte, bonitas las últimas tres o cuatro escenas.

Es genial. Teatro del grande. Me invitó mi novia y disfrutamos de la interpretación, de la historia, de la puesta en escena y de las localidades que nos brindó este servicio. Petra von Kant y Karin están para comérselas. Marlene, la silenciosa, es un auténtico retro que supera con sobresaliente. La niña es un amor, la canción que interpreta, Cuore, es de los más tierno que he visto en un teatro. No os lo podeis p0erder. No hay famosos, hay talento. Gracias.

Me preocupó ver que en un viernes noche, solo había ocho filas de audiencia y ni siquiera completas. Sin embargo la representación estuvo bien, una obra centrada en sentimientos, interpretada solo por mujeres, abordando el tema de la homosexualidad femenina, tuvo que ser una gran audacia en el momento que se escribió. Me gustó la interpretación de las actrices, unas más que otras. Y es curiosa la sencilla puesta en escena. Vale lapena acercarse a verla.

La obra no cubrió mis expectativas. A pesar de que la interpretación es buena, me gustaron muchos las actrices, en particular la actriz principal, la puesta en escena no me convence. No logré engancharme, creo que el texto da para más de lo que se logra transmitir. Parece que esa adaptación moderna le quita la sobriedad que lo haría más creíble. De todos modos fue un rato agradable y me gusta que se apueste por adaptaciones de obras de este tipo.

Las actrices muy buenas, aunque las desluce muchísimo la pobre y a veces absurda puesta en escena. Al entrar en la sala, unas chicas ordenan el mobiliario escénico sin que sepas si son actrices o empleadas de mantenimiento. Algunas acciones se escenifican de tal manera, que si lo que se pretende es lo novedoso, lo que se logra, es una cutrada. Pero repito, las actrices, estupendas y la trama,pues,Fassbinder.O sea, que vale la pena.