María de Buenos Aires - Veranos de la villa

Se puede escribir un texto denso sin perderse en lo rebuscado con el resultado de confundir al entendimiento. Seguro que María era una buena persona pero no se identifica en qué momento ni por qué se busca la ruina, ni de dónde sale un niño después de muerta, ni... etc, etc. El tenor y la soprano deberían dedicarse mejor a la zarzuela, con todos mis respetos para la zarzuela, porque sobre todo él, abusa del vibrato una barbaridad. Para mi gusto lo único que es un placer es la música, la orquesta que la interpreta y el Duende que le saca un buen partido al texto.

La valoración es francamente deficiente. La protagonista carece de voz, en los agudos literalmente chilla, y es una mediocre actriz. El cantante masculino principal desentona. La puesta en escena carece de la más elemental originalidad. Tan sólo se salva el recitador y en algunos momentos el ballet. La orquesta poco empastada. Fue una lástima que una ópera interesante de una gran calidad musical se haya presentado en Madrid en estas condiciones tan lamentables. El público aplaudió muy poco y hubieron algunos abucheos.

Lamento si mi crítica resulta ser lapidaria; de momen tos parecía ser una puesta en escena de fin de curso de colegio, los cantantes (ambos) me parecían grotestos, desafinados, muy mal actuado. sin embargo el buen papel del recitante ayudó un poco a relajarse en los números justamente de "teatralización medida y expresiva" (tal vez sea él el único que se salve de mi mala crítica). En cuanto a la música mejor ni hablar. Algo así como los japoneses haciendo flamenco. "Lamentable a igual que la sonorización".

El personaje de María lo peor de la obra por lo que ya se ha dicho anteriormente. El problema es que siendo éste el eje principal de la obra, toda su fuerza se difumina y empieza a resultar pesada, se hace demasiado larga (un descanso nos hubiera venido bien). Además, le falta vigor y ritmo tanto en la música como en la coreografía. La puesta en escena en general tampoco nos ha gustado. Quienes conocemos la obra original, no la hemos reconocido en esta adaptación excepto en el Duende, que está estupendo.

Fantástico. Arrebatador. La puesta en escena, los bailes (en una obra así de surrealista no se puede bailar tango en plan Gardel), el Duende, la escenografía... todo muy innovador y haciendo justicia a la obra original. Evidentemente, algo así de sofisticado no puede llegar a todo el mundo... Merecería la máxima valoración si no hubieran elegido a la soprano (la voz de María es más arrabalera) y el Ladrón Antiguo Mayor. Todos deberían haber sido bonaerenses.

Francamente, una de las peores representaciones líricas que haya podido imaginar. Prácticamente nada se puede salvar, salvo la convincente interpretación del narrador y parte de la actuación musical, por momentos a la altura de la genialidad de piazzolla aunque desapareciendo en los momentos con más necesidades técnicas. Mala actuación de la soprano y sin palabras la del barítono. Señor Plaza, ¿dónde te has metido?.

Lo mejor la orquesta. Lo peor la soprano.Se trataba de un tango y le faltó esa emoción en la voz, ese desgarre.Quizás tenga buena voz para una ópera pero esto era una operita y sonó demasiado profesional.No transmitía emoción alguna. El cuerpo de baile flojillo, faltaron algunos tangos más. El narrador bastante bueno, era el único que ponía algo de emoción al espectáculo.

Regular siendo benévolo. Uno no habla "argentino", lo que plantea muchos problemas de comprensión de la trama que se cuenta. No se entiende al "duende", el barítono es flojo, la soprano no va mucho más allá y, en mi opinión, sólo se salva la coreografía y los tangos, lamentablemente escasos. Vamos, che, que son un poco "boludos".

Lo único que me gusto fué la música, muy buena, el resto incomprensible para mi, no se que es lo que me querían contar, no sabía interpretar las fotos del decorado y un cuadro de baile muy escaso En resumen no lo recomiendo, mejor comprarse un cd y escuchar la música en casa, por supuesto sin letra.

Puesta en escena simple pero correcta. Un poco pretencioso llamarlo opera. Si lo hubieran llamado musical habría sido mucho mas honesto. Los pocos solos de la solista que se asemejaban a la lírica fueron mas bien pobres... poquita voz y mucho falsete... a bastante bastante distancia de la Caballé ;-).