Tazón de sopa china y un tenedor (o hacer el gilipollas)

lo que más me ha gustado ha sido el tema que trataban y como lo trataban. Hacía que muchas veces me sintiera identificada. Otra de las cosas que más me ha gustado ha sido lo cercanos que parecían los actores y sus historias, esa naturalidad con que teñían todo el espectáculo te hacía olvidarte de que estabas en un teatro. Cositas que no me gustaron, los topicazos que la actriz le suelta al hombre que saca del público, los ejercicios de cuerpo para mi gusto quedaban sucios. Me gustó mucho el momento radio y sopa instantanea, se creó un clima muy emotivo.

Me encantó. Tuve la suerte - o la desgracia, ¡jajaja! - de ocupar la primera fila únicamente con mi amiga Saman, y disfruté del espectáculo muy de cerca. De hecho hubo un momento en que tanta cercanía como espectador se tornó en protagonismo, pues fui arrancado de mi asiento para ser despiadamente el conejillo de indias de la actriz Lidia González, que con David Franch y Ángeles Ciscar estuvieron fenomenal; nos desnudaron emocionalmente, y lograron transmitirnos cuán difícil resulta el entendimiento de ambos sexos en pareja. Delicioso video final.

Esta obra ofrece al espectador una perspectiva de la complejidad de las relaciones de pareja muy diferente de la que estamos acostumbrados: mediante la expresión corporal y el uso de no muchas, pero acertadas palabras, uno se ve reflejado en multitud de sentimientos, de pensamientos, de silencios. Me han gustado mucho los actores, por su fuerza, su dedicación y su ternura. Por conseguir crear un clima cálido y acogedor con el público. Y por haberse esforzado tanto en poder ofrecer una visión tan alternativa de la vida misma.

Sencillamente espectacular. Es teatro experimental, por lo que el formato puede descolocar a quien espere encontrar los típicos discursos sobre las parejas. Son capaces de reflejar con una magnífica expresión corporal sensaciones de la vida de pareja que a mi me impresionaron más que cualquier texto. Desde una aparente sencillez, se proponen unas reflexiones en una fantástica, arriesgada y elaborada puesta en escena, que no olvida en ningún momento la importancia de la palabra, pero sin sentar cátedra. Fantástico.

IMPACTANTE!!! Sincera, divertida, arrolladora, deliciosa. Los actores te miran a los ojos y comunican, te destripan y te llevan a esa aventura que es la vida, te hacen ver lo gilopollas que podemos ser y como nos avenimos a ello diariamente. El video de los caracoles genial! Hay una cancion que nos estremecio a mis amigos y a mi!Creo que la cantaba la pastori y la letra es de Sabina, si estoy equivocada decidmelo por favor!!!! Seguiremos el rastro de esta compania teatral!.

Apuesta arriesgada pero de la que salen muy airosos los jovenes de Amaranto. Teatro vanguardista pero que no te apabulla con efectismos tecnologicos y, sobre todo, hablando del amor y las relaciones de pareja es capaz de decirnos cosas aun interesantes. La parte mas "fisica" del espectaculo, desde mi punto de vista, es la mas conseguida. Atencion!! alguien del publico participa cada dia y las pasa "canutas". Muy recomendable.

Me gustó mucho el hecho de que hiciera expresión corporal para darnos a entender al público qué estaba sucediendo o qué era lo uqe sentían. También fué muy divertido lo de que nos hicieran la foto a la entrada, como recuerdo, con aquellos maniquíes. Mi hermana se hizo la foto con el actor y fué lo mejor, pues él supo hacer de pareja perfectamente. La foto ha quedado genial. Lo recomiendo.

Me parece que es un viaje emocional. Sin pretensiones, eso les hace mas creibles. Si no te identificas, es porque decides no viajar... Un tema universal, llevado a pequeña escala- es la forma mas inteligente de exponer... como el cine social. A esos que hacen lo que quieren con dos duros y lo hacen porque tienen algo que decir, yo les doy un 10. A seguir creando, desde quienes sois... luisa.

Espectáculo muy bueno y muy entretenido. Toca sobre la problemática de las relaciones en pareja, y lo reflejan muy bien sus actores, Lídia y David. En general bastante buena, aunque hay momentos en que se hacen un pelín monótonos y pesaditos. Mi valoración es un 4 sobre 5. Gracias amigos de Atrápalo por todo!!.

Fué una velada genial! Ya, nada mas recoger las entradas nos regalaron un libro para cada uno a elegir en una extensa lista, y luego la obra fué muy fresca, divertida, dinámica y original. Estaba en primera fila Carlo-Mo de la fabulosa obra " Mal parto me raya se atormenta una vecina" . Recominedo " Tazón de sopa china y un tenedor (o hacer el gilipollas)" 100%.