04/05/2017
Bárbara le da un
5.8
"Un largo viaje, pero se queda corta la experiencia"
El observatorio está en un lugar mágico, en medio de la NADA, lo que facilita la visualización de las estrellas y planetas, dada la poca contaminación lumínica. Durante la primera parte se explica en una sala cerrada a través de un ordenador, casi a tiempo real, cómo se forman las estrellas, los planetas, las nebulosas... y tras una hora, el resto de lo que queda de actividad se realiza en el observatorio con el telescopio de más de 22.000€ en donde te vas turnando con la gente para mirar por el pequeño agujero. Lo bueno es que fuimos cuatro, cuando sean más de 10 personas, hasta que te toca, te puedes morir. No esperes ver los planetas como en los libros, mirar por el telescopio es otra cosa. Se ven luces, puntos blancos, lumínicos.. Júpiter sí que se puede ver bien, pero depende lógicamente, de la época del año.
¿Qué debería tener la experiencia para ser perfecta?
Pondría algún telescopio fuera, no de tanta calidad, pero sí de los que se pueden comprar, para poder ver con ellos y que la experiencia fuera más completa, sobre todo si vas con niños. A la vuelta, se puede comprar un telescopio y así en casa poder \'jugar\' y aficcionarse a la astronomía.
¿Si tuvieras que describir tu experiencia con una palabra o adjetivo qué dirías?
Incompleta
Positivo:
La poca gente que fuimos
Negativo:
La lejanía y la carretera tan estrecha hasta llegar al observatorio. Está correcta y arreglada, pero si sube mucha gente a la vez... También por otro lado, el guía entiende muchísimo, se desvive por contarlo, pero insiste reiteradamente (una y otra vez) en la visita completa de 150?... y que como es privada, se puede ver y estar más.