Oferta Primavera: Camas automasaje de piedras calientes de jade

Una experiencia alucinante, diferente a todo lo que te puedas imaginar, cuando acabas parece que te han dado una paliza, pero rápidamente notas un bienestar maravilloso. Se lo recomiendo a todo el mundo, aunque no tengas ningún tipo de dolencia, aunque sólamente sea para relajarte. 100 % recomendable. El trato exquisito, te explican paso a paso el funcionamiento de las camillas y la maravillosa experiencia termina con un sorprendente masaje (con otro aparato) en los pies. !No os lo perdais.

La verdad es que fue una gozada... El trato hacia el cliente fue increible, y el masaje de las camas... un gustazo. Llegas con tu ropa normal, no es necesario que lleves traje de baño, ya que te tumbas en la cama con la ropa puesta. Te meten en una cabina con una luz muy tenue, casi a oscuras, y la cama empieza a masajearte desde el cuello hasta casi el coxis. Y otro rodillo por las piernas. Además, las piedras están calientes. Lo recomiendo. Tienen más servicios. Habrá que probarlos...

Estuve en el centro "Mejorarte" el pasado viernes, y me regalé media hora en una cama de automasaje y luego otra media con un masaje manual que me dio David y que me encantó. La cama de piedras de jade está bien; lo mejor es el calorcillo que te da por todo el cuerpo y que te relajas mucho ¡vamos, que casi me quedo sopa! son como unos rollos que se van moviendo debajo de ti por todo el cuerpo y que te dan calor al mismo tiempo. Una experencia interesante.

Probé este servicio debido a la gran cantidad de buenas opiniones. Los pros: es una experiencia nueva, el servicio es muy amable y hay que destacar el masaje de pies que te ofrecen al terminar. Los contras:las cabinas no están insonorizadas (son telas rodeando la camilla), a mi me hizo daño en la zona de los gluteos, entre el hueso y el musculo. A destacar: es una nueva experiencia, pero no sustituye un masaje manual, más caro, pero mejor en todos los sentidos.

Bueno el masaje no estuvo nada mal, he de reconocer que yo tengo la espalda un poco huesuda y las dos pormeras pasadas del rollo no fueron muy agradables, pero una vez que conseguí relajarme, mereció la pena. Por otro lado a mi marido sí que le mereció la pena, pues tenía alguna que otra contractura y salío muy aliviado. Lo recomiendo porque además el precio es econcomico.

Muy bueno, sales como nueva. Sobre todo si combinas un masaje de cama con piedras calientes de jade y un masaje manual relajante con aceites naturales. Además venden cosas muy chulas: gafas da masaje para vista cansada, aplicador de masaje de vibración e infrarrojos, masajeador para reflexoterapia podal?cosas originales para regalar por Reyes. Lo recomiendo sin duda!.

No está mal. Al principio si que es un poco incómodo pero luego te acostumbras. Donde si que notas el efecto al salir es en las piernas, las tienes completamente relajadas, como nuevas. El trato bien, te explican un poco el funcionamiento, te tumbas, ponen el programa y a las 30 minutos se apaga. Merece la pena probarlo, luego ya depende de cada uno el repetir.

La verdad es q fue una experiencia bastante interesante, y más q nada por el precio q tenía!!. El servicio súper bueno, nada más llegar tuvimos q esperar un poco, y mientras tanto nos pusieron una máquinita que hacía masajes de pies!! El único pero es q al no ser muy alta, las piedras de la camilla cuando bajaban me hacían un poco de daño en los pies.

la verdad es que me ha gustado mucho.Pero creo que talvez deba utilizarse para relax o contracturas nomales.ya que yo tengo algo mas serio y en esa zona no me ha hecho muy bien. el calor me ha parecido muy innovador y agradable.sugerencia: la musica deberia de ser relajante, tranquila y no la que habia cuando fui, que era mas bien para una clase de aerobic.

Al principio me impresionó bastante, pero luego, cuando te acostumbras a los movimientos de la cama, son 30 minutos muy agradables. Aunque luego no salí con la sensación de relajación que esperaba. Un consejo para los de "Mejorarte". La música tiene que ser mucho más tranquila al tratarse de masajes de relajación. La que tienen es demasiado ruidosa.