Re cordis (un viaje desde la mente al corazón)

Reí y lloré. Alberto es increíble interpretando

Interesante, da qué pensar, en ocasiones remueve muchas emociones y el protagonista se deja la piel en el escenario

Fue una auténtica experiencia muy emotiva que me enganchó de principio a fin, donde reí, lloré.... Recomendadísimo!!

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

Nada, está bastante redondo

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

Simplemente darle la enhorabuena y ponerme a sus pies. Un alarde creativo a nivel dramaturgo, interpretativo y de puesta en escena. Desde ayer sigo conmovido por todo lo que pude ver, oír e imaginar

buena obra de tearto, alberto lo borda!!

Sin palabras me dejo esta función... un cumulo de emociones que disfrute al máximo... no pude despegar la mirada de escena, llore, rei, y me emocione con Alberto Amarilla....

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

Merchandising!!! camisetas o cosas!!! que sea consciente que desde que la obra esta en cartelera Ha creado una buena cantidad de seguidores...

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

le diria a Alberto Amarilla... OLE TU!!! Ole tu Memoria para tanto Guion... Gracias por hacernos olvidar nuestros problemas y movidas en ese tiempo que te disfrutamos en escena... eso le diria... Y al equipo LO MISMO que aunque no se vean... SE NOTA EL CURRRAZO en equipo... porque una sola persona no podría hacer esa maravilla

en cuanto llegué, vi que el teatro era muy pequeño y acogedor y que la sala estaba hasta arriba (punto positivo pues había gente a la que le interesaba). al ver la escena, vi que era muy minimalista, cosa que me hizo encender las luces de alarma, y más aún cuando vi entrar al actor medio desnudo. esperé antes de juzgar del todo la obra y poco a poco, me fui sumiendo en esta. la palabra impresionante se queda corta, miles de recursos,una interpretación impecable, risas, llantos, caídas de mandíbula, etc. mi novio acabó gastándome el paquete de clínex.

La puesta en escena reluce gracias a la magnífica actuación del único actor en escena. Es un viaje con distintos personajes representados de manera sobresaliente por solo una persona, algo que, desde luego, engrandece esta obra y la hace original, entre otras razones.

Una hora y media para un solo actor en una obra que trata temas en principio muy densos como son los avances de la neurociencia desde el dramatismo de una persona que se enfrenta al olvido... Varios son los personajes interpretados por Alberto Amarilla con sus momentos de risas y distensión para cogernos de la mano y viajar con el protagonista a la vez que viajamos dentro de nuestro cerebro y emoción. Hay cosas que se pueden mejorar, como el hecho de cortar los aplausos para poner unos créditos finales... aunque sin duda, es de lo mejor que he visto sobre las tablas últimamente.

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

Abrir las puertas a su hora. El barecito donde se espera es muy pequeño y agobió un poco la espera.

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

Simplemente le abrazaría para mostrarle mi agradecimiento por hacernos ese regalo y dar tanto de sí en el espectáculo.

La historia, la forma de actuar de Alberto Amarilla...como ries, como sufres, como hay momentos en los que sientes que el corazón se estremece...cómo se hace grande al darte cuenta de las verdaderas cosas importantes...te hace pensar, te hace disfrutar...ir a disfrutarla...es sencillamente maravillosa.

Única la verdad... he disfrutado como un niño la interpretación magistral de Alberto Amarilla... ese paseo por los Estados anímicos y por sus personajes ... la obra es preciosa

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

lo llevaría de gira por todos lados

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

alberto gracias por hacerme feliz y triste en el rato de tu obra ... me he sentido vivo