Enviado el 09/05/2017
"Decepcionante... caos organizativo."
Decoración sin imaginación. Lo más parecido a una cárcel de alta seguridad. Camas que parecen sacadas de un hospital. Personal sin interés por resolver los problemas que ocurren en sus instalaciones. Te cobran 10 € por el desayuno, un buffet cortito cortito aprovechándose de que la cafetería más cercana está a 20 minutos andando. Por la noche se oye constantemente el tráfico de la carretera a la que da el hotel.
Parking de pago cuyo acceso nadie controla, con el consiguiente riesgo para la seguridad. Nosotros pagamos estancia de parking y no pudimos aparcar porque había entrado todo el que quiso para una celebración de su restaurante. Las plazas de minusválidos son para los clientes ricachones que llegan en coches de lujo. Aunque se denuncia, los empleados no quieren molestarlos para que retiren su coche aparcado indebidamente y los minusválidos se tienen que ir a aparcar afuera... Demencial, o... ¿Aún estamos en la España de los Santos Inocentes?... En resumen, es mi fantástica experiencia en el Jardín del Milenio. Lo único bonito son las Palmeras, y eso no es mérito suyo. Señores, espabilen y no se duerman en los laureles, que el tener poca competencia no quiere decir que lo tengan todo hecho.
Por qué elegir este hotel
Ubicación.
Motivo de la reserva
Placer, pero los incidentes y la mala organización lo convirtieron en dolor.
positivo: Ubicación.
negativo: Decoración sin imaginación, parking caótico (6,5 ? el día) al aire libre sin organización ni vigilancia, donde pagas estancia y no encuentras plaza. Nadie quiere saber nada. Coches de lujo en las plazas de minusválidos sin serlo, desayuno exorbitádamente caro, ruido del tráfico en las habitaciones por la noche.
SOBRE ELCHE
Ciudad bonita, centro histórico, palmeral, museo de Puçol, basílica.
