Connect InternetSoy cervecero, lo confieso. Y un amante incondicional de las reuniones informales. Y recientemente me he dejado seducir por la analítica web. ¿Pero qué tienen que ver las churras con las merinas? Pues ojalá al final de este post descubramos la relación.

El caso está en que hace un tiempo me inicié en el noble arte de la analítica web de la mano de la herramienta Google Analytics y poquito a poco me he ido convirtiendo en un gurú (o eso afirma mi buen amigo Pere Rovira, y encima sin sobornarle). ¿Pero qué carajo es esto de la analítica web? Pues a grandes rasgos se trata de sentarse a mirar un montón de números y al cabo de un rato gritar “¡Eureka! ¡Los usuarios de Atrapalo no quieren más un fondo rojo! ¡Lo quieren fucsia con topitos negros y que de fondo se escuche los hermanos Calatrava!”. Bueno, ya me imagino que no, pero ya pilláis la idea.

Y ¿a que mola? El inconveniente de todo esto es que si lo practicas mucho te acabas convirtiendo en un tío gris, de esos que llevan traje y corbata hasta en sábado… Así que hablándolo con Pere dimos con la solución. Los ¡Conversion Thursdays!

Si por algo nos caracterizamos los catalanes es que de cualquier tontería sacamos una excusa para festejar, así que con el nombre molón de “Conversion Thursdays” nos hemos montado una excusa como cualquier otra para juntarnos la gente del ramo para echar unas cervezas y charlar sobre nuestras cosillas. Vamos, una versión más “nuestrada” (es que “castizo” me suena a rancio) de los “Web Analytics Wednesdays” que tienen el inconveniente de tener lugar demasiado lejos…

Y ayer, jueves, ¡fué el primero! Fué genial, nos reunimos casi treinta personas en el Cafè Schilling de Barcelona y nos tiramos más de tres horas charlando de todo lo que rodea la analítica. Puede que no suene muy apasionante visto así, pero se acercaron estudiantes para conocer el día a día de los que llevan años trabajando en esto, gente nueva que buscaba soluciones a los problemas, gente experta que buscaba nuevos puntos de vista, debates éticos e ideológicos… Vamos, mucha chicha en poco tiempo, y encima con las vistas que ofrece cualquier bar del centro de Barcelona. Vamos, que ya tenemos ganas de que sea el segundo jueves de marzo para repetir, y quizas atraer más gente. Además, ya hemos recibido peticiones para montar e impulsar eventos similares en Madrid, Valencia, Buenos Aires… ¿Existe mejor recompensa a las ganas de echarse una cerveza entre amigos?

Connect InternetSoy cervecero, lo confieso. Y un amante incondicional de las reuniones informales. Y recientemente me he dejado seducir por la analítica web. ¿Pero qué tienen que ver las churras con las merinas? Pues ojalá al final de este post descubramos la relación.

El caso está en que hace un tiempo me inicié en el noble arte de la analítica web de la mano de la herramienta Google Analytics y poquito a poco me he ido convirtiendo en un gurú (o eso afirma mi buen amigo Pere Rovira, y encima sin sobornarle). ¿Pero qué carajo es esto de la analítica web? Pues a grandes rasgos se trata de sentarse a mirar un montón de números y al cabo de un rato gritar “¡Eureka! ¡Los usuarios de Atrapalo no quieren más un fondo rojo! ¡Lo quieren fucsia con topitos negros y que de fondo se escuche los hermanos Calatrava!”. Bueno, ya me imagino que no, pero ya pilláis la idea.

Y ¿a que mola? El inconveniente de todo esto es que si lo practicas mucho te acabas convirtiendo en un tío gris, de esos que llevan traje y corbata hasta en sábado… Así que hablándolo con Pere dimos con la solución. Los ¡Conversion Thursdays!

Si por algo nos caracterizamos los catalanes es que de cualquier tontería sacamos una excusa para festejar, así que con el nombre molón de “Conversion Thursdays” nos hemos montado una excusa como cualquier otra para juntarnos la gente del ramo para echar unas cervezas y charlar sobre nuestras cosillas. Vamos, una versión más “nuestrada” (es que “castizo” me suena a rancio) de los “Web Analytics Wednesdays” que tienen el inconveniente de tener lugar demasiado lejos…

Y ayer, jueves, ¡fué el primero! Fué genial, nos reunimos casi treinta personas en el Cafè Schilling de Barcelona y nos tiramos más de tres horas charlando de todo lo que rodea la analítica. Puede que no suene muy apasionante visto así, pero se acercaron estudiantes para conocer el día a día de los que llevan años trabajando en esto, gente nueva que buscaba soluciones a los problemas, gente experta que buscaba nuevos puntos de vista, debates éticos e ideológicos… Vamos, mucha chicha en poco tiempo, y encima con las vistas que ofrece cualquier bar del centro de Barcelona. Vamos, que ya tenemos ganas de que sea el segundo jueves de marzo para repetir, y quizas atraer más gente. Además, ya hemos recibido peticiones para montar e impulsar eventos similares en Madrid, Valencia, Buenos Aires… ¿Existe mejor recompensa a las ganas de echarse una cerveza entre amigos?