Si eres un culo inquieto y estabas esperando al borde de la silla, tranquilo que ya han llegado. ¡Por fin están aquí las vacaciones de Semana Santa! La excusa perfecta para una escapada. Aléjate de la rutina con un viaje dentro de España, donde la Semana Santa se celebra con fervor religioso, o por Europa, donde empaparse de la cultura de otros países. Tú eliges. Esta Semana Santa santificarás las fiestas. Nosotros te recomendamos nuestros 5 destinos más TOP, pero puedes explorar otros rincones al mejor precio aquí mismo.

1. Sevilla, España

Esta ciudad es una de las que vive con más intensidad la Semana Santa. Desde el Viernes de Dolores hasta el Domingo de Resurrección, la capital andaluza se llena de muestras religiosas capaces de conmover a cualquiera. La pasión con la que los miembros de las más de 60 cofradías realizan procesiones por sus calles es digna de admiración.   

En la Semana Santa de Sevilla podrás disfrutar de un sinfín de procesiones, las preciosas imágenes de sus pasos, la increíble fuerza y coordinación de los costaleros que cargan los pasos… déjate llevar por la explosión de religiosidad y música donde incluso se cantan saetas desde los balcones. ¿Nuestra recomendación? No te pierdas la Madrugá, la noche más especial de todas (entre el jueves y el viernes Santo), donde más de 500.000 personas salen a la calle para ver a las hermandades más antiguas en un recorrido de 12 horas de madrugada. 

Celebraciones a parte, Sevilla para muchos engloba la esencia de España: la gastronomía, el arte, la historia, la mezcla de culturas…. Podrás visitar la Giralda, el Palacio de la Condesa de Lebrija, el barrio de Santa Cruz, la Catedral, la Plaza España o ver un espectáculo de flamenco en directo. Podrás probar delicias de la gastronomía sevillana como los soldaditos de pavía, los chipirones a la plancha o un montadito acompañado de una cerveza bien fría en un bar. Descubre su “color especial” con las mejores ofertas de vuelo + hotel desde 166€ mientras disfrutas de una semana inolvidable.

2. Zamora, España

En Castilla y León también se celebra la Semana Santa con un carácter único: sobrio, austero y con mucho fervor. Fue declarada de Interés Turístico Internacional en 1986 y desde entonces no ha bajado el nivel. Zamora es la única ciudad en España que dispone de un Museo de Semana Santa donde podrás acercarte a observar con detalle cada una de las esculturas que conforman las procesiones. Junto al Museo se encuentra la Iglesia de Santa María la Nueva, en cuyo interior se encuentra el Cristo Yacente que recorre la ciudad en la noche del Jueves Santo. Miles de zamoranos emocionados acompañan el recorrido por las hermosas calles de la ciudad  hasta llegar a la plaza de Viriato, donde se canta un conmovedor Miserere. 

Otro momento especial de la Semana Santa zamorana es el Juramento del Silencio, en la Plaza de la Catedral, que hace el alcalde en nombre de todos los zamoranos durante la procesión del Cristo de las Injurias en la tarde del Miércoles Santo. Si decides asistir, deberás guardar silencia absoluto durante todo el desfile. 

En Zamora no solo hay tradiciones religiosas sino que también gastronómicas para que te pongas las botas. Deliciosos platos para tu paladar como las sopas de ajo en la madrugada del Viernes Santo o el ‘Dos y pingada’ del Domingo de Resurrección que consiste en dos huevos fritos, dos o tres magras de cerdo pasadas por la sartén y pan. Y para beber, tienes a elegir entre sus tres vinos de denominación de origen: vino de Toro, de Arribes del Duero y Tierra del Vino de Zamora.  Si buscas una Semana Santa rica en historia, cultura, patrimonio y fe, no dejes escapar estos vuelos + hotel desde 150€ que convertirán Zamora en tu destino favorito. 

3. Lanzarote, España

Con temperaturas de entre 24 y 21 grados, nadie puede resistirse a visitar esta maravillosa isla en Semana Santa. Vale, es verdad que no será tan fervorosa con sus celebraciones religiosas, pero puede que te apetezca más estar de relax en la playa durante las vacaciones. Hablar de Lanzarote es hablar de una de las mayores bellezas de la naturaleza.

Sobran razones para visitar esta isla canaria, pero si necesitas que te convenzan he aquí algunas de las nuestras: en Lanzarote podrás recargar las pilas al sol y ponerte al día con tus dosis diarias de vitamina D perdidas durante el invierno. Cuando decidas tumbarte al sol, te darás cuenta de que en esta isla hay aguas cristalinas y arena blanca para todos los gustos. Además, podrás disfrutar cada día de una playa diferente gracias a su amplia variedad de terrenos. Pero Lanzarote es mucho más que estirarte a orillas del mar todo el día, es un lugar perfecto para hacer excursiones y descubrir paisajes volcánicos de lo más increíbles. ¡Te parecerá que estás en Marte! 

Si eres fan de los deportes al aire, podrás disfrutar como nunca del surf, bike, triatlón, running, buceo… Y cuando te apetezca algo de comer después de tanto ejercicio, quedarás pasmado con sus increíbles productos frescos y de la tierra, entre los que destacan el pescado, el queso, sus papas con mojos o sus vinos de origen volcánico. ¡Todo para chuparse los dedos! Prepara las maletas, que Lanzarote y sus vuelos + hotel desde 164€ te están esperando.

4. Colmar, Francia

Semana Santa es sin duda uno de los mejores momentos para visitar Colmar. La luz de la primavera ilumina las coloridas fachadas de estilo gótico alemán, los pasteleros decoran huevos de chocolate, los artesanos hacen productos auténticos y únicos, los chefs  proponen sus menús acompañados de vinos de la región, los músicos callejeros tocan en el centro histórico de la ciudad y se organizan decenas de conciertos de música clásica y jazz en la iglesia de San Mateo y en la Salle des Catherinettes. Colmar es pura vida en esta época del año. 

No es de extrañar que esta ciudad del nordeste de Francia fuese galardonada con el título de mejor destino para Semana Santa en Europa. Desde hace 10 años, organizan una fiesta de Pascua con mercadillos tradicionales, eventos y música para celebrar esta época del año en la ciudad. En sus mercados ofrecen lo mejor de la artesanía y gastronomía francesa. Con productos locales, joyas hechas a mano, juguetes tradicionales, especialidades gourmet locales y los típicos huevos y conejos de chocolate. No puedes olvidar probar el “Lammele”, un tradicional pastel con forma de oveja. Del 3 al 19 de abril de 2020, podrás disfrutar de actividades tradicionales de Pascua en esta encantadora ciudad que parece sacada de un cuento. No esperes más y esta Semana Santa déjate hechizar por la magia de Colmar con estas ofertas de vuelo + hotel desde 150€.

5. Ámsterdam y alrededores, Países Bajos 

Parte de Holanda se transforma en un vasto mar de flores desde mediados de marzo hasta mediados de mayo. Cada año, millones de tulipanes florecen en Ámsterdam y sus alrededores marcando el comienzo de la primavera. Turistas de todos los rincones del mundo viajan a Ámsterdam en Semana Santa para visitar los jardines de Keukenhof. Cientos de miles de tulipanes crecen allí cada año y son admirados por los visitantes internacionales. Un verdadero paraíso natural que cada año se dedica a un tema determinado. El tema de este año es “un mundo de colores”, lo que se presenta prometedor con la plantación de 7 millones de bulbos de distintas formas y tonalidades.

También puedes caminar en el hermoso pueblo de Zaanse Schans, donde ver a un fabricante tradicional de zuecos en acción o admirar sus molinos de viento. Este pintoresco lugar es un museo al aire libre en el que podrás empaparte del pasado de Holanda y conocer su modo de vida en el siglo XVII. Todo a un tren de media hora de distancia de Ámsterdam. Reserva ya tu vuelo + hotel favorito desde 260€ para disfrutar de este espectáculo de la primavera. 

Esta Semana Santa sal a disfrutar del rincón del mundo que más llame tu atención. Alguien dijo una vez que toda gran aventura empieza por un primer paso, así que no lo pienses más y aprovecha estos días para perderte por alguno de estos destinos. ¡Bon voyage! 

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Fanática empedernida del buen rollismo. Me encontrarás sumergida en las páginas de un buen libro, escuchando vinilos en mi habitación, perdida en una exposición o haciendo fotos con mi cámara analógica en cada rincón.