¿Qué escuchaban los padres de la Generación Z?
En la próxima década, la ya asentada Generación Z potenciará las influencias de la música que escuchaban sus padres, generalmente adolescentes a principios de los 90. De esta forma, el regreso de géneros reinventados como el grunge o el britpop será más que posible en un mundo donde las modas cada vez son más cíclicas.
Cantantes comunicadores
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Durante los últimos años, y especialmente gracias a su exposición en redes sociales, los artistas han dado un valor más personal a sus letras, tratando de transmitir un mensaje en torno a temas que van desde la autoaceptación al empoderamiento femenino. El año pasado, Ariana Grande agradecía a todos sus ex por ayudarla a crecer en thank u, next; Lizzo animaba a todas las mujeres del planeta a aceptarse en Truth Hurts, y Selena Gomez recriminaba a ¿Justin Bieber? el haberla reemplazado por Hailey Baldwin en su nueva canción Lose You To Love Me.
Electrónica ambiental
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Las influencias de la música electrónica de los 90 tales como el trip-hop, el trance o el ambient (de Portishead a Faithless) volverán a tener presencia en la música electrónica de la próxima década. Un regreso que llegará acompañado del revival de la cultura rave y un enfoque de la música de baile más minimalista.
Un pop global
En un reciente artículo de la revista Time, la prestigiosa publicación nombraba a Rosalía como “la perfecta definición del pop global de futuro”. Teniendo en cuenta que la cantante más famosa de España en la actualidad ha sido capaz de llevar su flamenco-trap a Coachella, cantar con James Blake, o montar una canción con Billie Eilish, no nos extrañaría nada que el futuro del pop sea así: global, aún más rico en matices y libre de fronteras.
Más boy-bands asiáticas
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Otra de las consecuencias de este “pop global” será el incremento de artistas llegados de países asiáticos y su exposición al resto del mundo. Con ejemplos como la banda coreana BTS, viviremos una década en la que las boy-bands al estilo Backstreet Boys volverán a los primeros puestos de las listas.
Si bien el futuro siempre es impredecible, tratar de definirlo a través de las pistas con las que contamos en la actualidad se vuelve más posible que nunca. Y en esta ocasión, decir adiós a la década del trap para abrazar nuevos sonidos es una realidad más que certera.